De mes en mes/febrero2014
En las últimas semanas han ido apareciendo en
distintos medios, y expresados por distintas personalidades opiniones
sobre la situación financiera española y mundial. Sobre la primera hemos
leído textos de economistas que han puesto sobre la mesa la inmensa
losa que está suponiendo la odiosa deuda externa para la recuperación de
la economía española, incluso quienes dicen que se está incrementando
hasta límites imposibles de pagar, piden la renegociación e incluso no
pagar la deuda primero porque no se puede y lo segundo por la
repercusión social y económica que la misma tiene para el futuro del
país. Hay que recordar que pagamos más de 105 millones diarios de
intereses.
Pero, lo que más llama la atención es que estos analistas no son de la izquierda que podemos representar Izquierda Unida o el PCE, sino de trayectoria socialdemócrata, de la órbita de PSOE e incluso de procedencia de derechas. Los hay quienes dicen que se está construyendo una gran burbuja financiera global de imprevisibles predicciones. También es cierto que los medios subvencionados por el sistema no se han hecho eco, al menos, de forma significativa de la noticia.
Como muestra lo que publicaba Juan Laborda el 25 de enero en un diario digital. “Desde estas líneas hemos explicado hasta la extenuación que nuestra auténtica preocupación es el estallido de la actual burbuja financiera, que pondrá de nuevo encima de la mesa el origen y causa de la crisis, un brutal volumen de deuda impagable, la insolvencia del sistema bancario occidental, y la concentración de riqueza en unas pocas manos”.
Hay más. Los datos del empleo han demostrado que -aunque interceda la Virgen del Rocío y Santa Teresa- no bajan de la tasa del 26% y de los seis millones de parados, aumentan a un millón ochocientos mil los hogares en los que ninguno de sus integrantes tiene ingresos. La pobreza crece y 3 de cada 10 niños malvive en el umbral de pobreza. El gobierno, al igual que nos explica que la crisis es una maldición divina, espera que la divinidad solucione la situación; mientras tanto garantizan que sus amigos sigan haciéndose ricos y aumenta la brecha entre los que más tienen y los que menos, llevándose por delante a la llamada clase media.
En Mundo Obrero y en esta sección hemos desarrollado la situación social y económica de forma extensa. Con un repaso a lo publicado y con la realidad de los datos se puede comprobar que, a pesar de lo que García Rubio llama el nuevo relato de Rajoy, no se vislumbra ningún síntoma de recuperación que no sea el de la cuentas corrientes del PP y de su gobierno.
Mientras esto es así, la ciudadanía gana batallas, la ultima se ha cobrado el puesto del Consejero de Sanidad del PP de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquetty, ante el fracaso del proceso de la privatización de la sanidad. La Marea Blanca se ha llevado por delante el proyecto Esperanza Aguirre-González de privatización de la sanidad madrileña, laboratorio para el resto de España. Los vecinos del barrio burgalés del Gamonal le doblan el pulso al Alcalde del PP Javier Lacalle obligándole a retirar el polémico proyecto de construcción de un bulevar, ante las movilizaciones de los vecinos que reivindicaban que el dinero de la inversión de dedicara a mejoras sociales y a proyectos de empleo. Al igual que los trabajadores y trabajadoras de la recogida de residuos de Madrid quebraron la voluntad de la Botella y Cía. de ajustar el presupuesto y de cambiar beneficios empresariales por empleo.
Pero quedan otras batallas que ganar, las más próxima son las movilizaciones contra la regresiva y retrograda Ley del Aborto que quiere imponer el ministro de justicia del PP Alberto Ruiz Gallardón, cediendo a las presiones de la Iglesia y los sectores más retrógrados del partido del gobierno y de la Iglesia española. Una iniciativa de movilización contra la regresiva y restrictiva reforma de la Ley del Aborto del Partido Popular que está suponiendo, incluso, se solivianten las filas populares.
Desde el PCE vamos a participar en el Tren de la Libertad el día 1 de febrero llenando las calles de violeta y de rojo, con compañeras y compañeros de distintos partidos del PIE que en toda Europa están dando apoyo. La lucha continúa en la defensa de un Derecho fundamental como es el derecho al aborto, libre, en la sanidad pública y fuera del Código Penal.
Otra de las movilizaciones, de la que informamos en el anterior número de Mundo Obrero, es la Marcha de la Dignidad que el 22 de Marzo llegará a Madrid desde todos los puntos de España y que fue apoyada por el Comité Federal en su primera reunión tras nuestro Congreso. La marcha, unitaria y pacífica no es fin de un ciclo, si no el principio de una agenda de acciones sostenidas en el tiempo contra las políticas de la Troika y los recortes. Volviendo al principio de este texto, entre otras reivindicaciones de la Marcha de la Dignidad está el no pago de la deuda odiosa, políticas para la generación de empleo y de protección social entre otras.
Lo hemos venido planteado desde esta columna: la movilización organizada y la construcción de una mayoría social en torno a una propuesta es uno de los mecanismos para que se paren los recortes y la pérdida de derechos.
Pero, lo que más llama la atención es que estos analistas no son de la izquierda que podemos representar Izquierda Unida o el PCE, sino de trayectoria socialdemócrata, de la órbita de PSOE e incluso de procedencia de derechas. Los hay quienes dicen que se está construyendo una gran burbuja financiera global de imprevisibles predicciones. También es cierto que los medios subvencionados por el sistema no se han hecho eco, al menos, de forma significativa de la noticia.
Como muestra lo que publicaba Juan Laborda el 25 de enero en un diario digital. “Desde estas líneas hemos explicado hasta la extenuación que nuestra auténtica preocupación es el estallido de la actual burbuja financiera, que pondrá de nuevo encima de la mesa el origen y causa de la crisis, un brutal volumen de deuda impagable, la insolvencia del sistema bancario occidental, y la concentración de riqueza en unas pocas manos”.
Hay más. Los datos del empleo han demostrado que -aunque interceda la Virgen del Rocío y Santa Teresa- no bajan de la tasa del 26% y de los seis millones de parados, aumentan a un millón ochocientos mil los hogares en los que ninguno de sus integrantes tiene ingresos. La pobreza crece y 3 de cada 10 niños malvive en el umbral de pobreza. El gobierno, al igual que nos explica que la crisis es una maldición divina, espera que la divinidad solucione la situación; mientras tanto garantizan que sus amigos sigan haciéndose ricos y aumenta la brecha entre los que más tienen y los que menos, llevándose por delante a la llamada clase media.
En Mundo Obrero y en esta sección hemos desarrollado la situación social y económica de forma extensa. Con un repaso a lo publicado y con la realidad de los datos se puede comprobar que, a pesar de lo que García Rubio llama el nuevo relato de Rajoy, no se vislumbra ningún síntoma de recuperación que no sea el de la cuentas corrientes del PP y de su gobierno.
Mientras esto es así, la ciudadanía gana batallas, la ultima se ha cobrado el puesto del Consejero de Sanidad del PP de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquetty, ante el fracaso del proceso de la privatización de la sanidad. La Marea Blanca se ha llevado por delante el proyecto Esperanza Aguirre-González de privatización de la sanidad madrileña, laboratorio para el resto de España. Los vecinos del barrio burgalés del Gamonal le doblan el pulso al Alcalde del PP Javier Lacalle obligándole a retirar el polémico proyecto de construcción de un bulevar, ante las movilizaciones de los vecinos que reivindicaban que el dinero de la inversión de dedicara a mejoras sociales y a proyectos de empleo. Al igual que los trabajadores y trabajadoras de la recogida de residuos de Madrid quebraron la voluntad de la Botella y Cía. de ajustar el presupuesto y de cambiar beneficios empresariales por empleo.
Pero quedan otras batallas que ganar, las más próxima son las movilizaciones contra la regresiva y retrograda Ley del Aborto que quiere imponer el ministro de justicia del PP Alberto Ruiz Gallardón, cediendo a las presiones de la Iglesia y los sectores más retrógrados del partido del gobierno y de la Iglesia española. Una iniciativa de movilización contra la regresiva y restrictiva reforma de la Ley del Aborto del Partido Popular que está suponiendo, incluso, se solivianten las filas populares.
Desde el PCE vamos a participar en el Tren de la Libertad el día 1 de febrero llenando las calles de violeta y de rojo, con compañeras y compañeros de distintos partidos del PIE que en toda Europa están dando apoyo. La lucha continúa en la defensa de un Derecho fundamental como es el derecho al aborto, libre, en la sanidad pública y fuera del Código Penal.
Otra de las movilizaciones, de la que informamos en el anterior número de Mundo Obrero, es la Marcha de la Dignidad que el 22 de Marzo llegará a Madrid desde todos los puntos de España y que fue apoyada por el Comité Federal en su primera reunión tras nuestro Congreso. La marcha, unitaria y pacífica no es fin de un ciclo, si no el principio de una agenda de acciones sostenidas en el tiempo contra las políticas de la Troika y los recortes. Volviendo al principio de este texto, entre otras reivindicaciones de la Marcha de la Dignidad está el no pago de la deuda odiosa, políticas para la generación de empleo y de protección social entre otras.
Lo hemos venido planteado desde esta columna: la movilización organizada y la construcción de una mayoría social en torno a una propuesta es uno de los mecanismos para que se paren los recortes y la pérdida de derechos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario